domingo, 30 de marzo de 2008

Drunk sincerity

Escrito hace un par de semanas.

Mientras escribo esto observo cómo un amigo va cayendo lentamente al mundo de la inconsciencia producida por la ingesta indiscriminada de alcohol. No está borracho, al menos según él. Hemos estado tomando vodka desde hace un buen rato, aunque yo me detuve para contestar una llamada y él siguió bebiendo sin cesar. Es por eso que ahora estoy consciente y puedo escribir esto y pensar de forma más o menos clara.
Siempre consideré cierto eso de que los borrachos no mienten. Algunos consideran que esto significa que un borracho te dirá todo lo que quieres saber, pero después de haber asistido a las borracheras de muchos de mis amigos (además de algunos a los que nunca consideré amigos, y de otros que por diversas razones dejaron de serlo), he notado que si bien los borrachos no mienten, tampoco te dicen todo lo que quieres oír, sino lo que quieren decir. Y ten la seguridad de que te lo dirán aunque no quieras oírlo.
"Te odio desde el momento en que te conocí" fue la confesión sincera de una de mis mejores amigas (que por cierto sigue siéndolo, porque nuestra amistad se basa justamente en esa relación amor-odio que siempre ha habido entre los dos), y lo dijo en plena borrachera, justo antes de caer inconsciente. "Todos son unos imbéciles que andan detrás de las que los tratan mal, las que los tratan como perros." Justo entre los ojos de todos los que estábamos ahí, amiga mía. Era cierto. Tal vez aún siga siéndolo. "Me acosté con X... no le digas a mi esposa, la amo y no quiero hacerle daño." No tengo idea de quién era el sujeto que me dijo eso, pero a eso siguió una escena deprimente que sólo terminó cuando el desconocido se desmayó. Tenía algo que decir y lo dijo, con total sinceridad, aunque no supiera a quién se lo estaba diciendo. (Sea como sea, si de verdad la amase no se habría metido con otra... sin embargo no mintió, porque en realidad cree que la ama. Interesante.)
Este amigo mío (cuya computadora estoy usando para escribir esto) finalmente se quedó dormido. Lleva años con una chica que lo trata peor que a zapatilla vieja, pero solamente estando ebrio se queja de ella y habla de terminar con la relación. En la mañana, después de tomar un café, la llamará y le dirá que es el amor de su vida, igual que las otras veces. Me pregunto si no será que pasamos una buena parte de nuestras vidas sin ser sinceros con nosotros mismos y sólo podemos serlo bajo ciertas circunstancias.

'Nuff said.

2 comentarios:

Unknown dijo...

no me digas que fue también un Spam! a mi también me llegó :(

Anónimo dijo...

No amigo...el lo sabe sobrio tambien, pero su dependencia emocional hacia ella, es mayor que su autoestima...es un noviadependiente...y cuando ella cansada de su debilidad, del poco orgullo que siente por el mismo se decida a dejarlo...el va a sentir que se le cae el mundo encima...apostamos??