domingo, 14 de septiembre de 2008

Cómo conseguí mi hacha y equipo actual

Por mucho tiempo quise aprender a tocar la guitarra eléctrica. La idea vino primero a mi mente cuando aún estaba en secundaria y comprar una guitarra era un asunto no sólo de tener el dinero para pagarla, sino también el tiempo para pasarse un día entero buscando una 90Km al norte (lo que sigue siendo más o menos lo mismo, pero ahora puedo costearla por mí mismo y de todas formar recorro esos 90Km ida y vuelta todos los días. Pero entonces era una aventura casi épica). Así que la idea se sentó al fondo de mi mente por unos doce años, haciendo apariciones casuales de tiempo en tiempo (especialmente cuando estaba cerca de una guitarra o una tienda de guitarras), y la air guitar se volvió parte de mi vida diaria. Luego aparecieron Guitar Hero, Rock Band y Frets on Fire para saciar mi sed de tocar guitarra. Entonces leí una entrevista en Rolling Stone en la que Kirk Hammett mencionaba estar tocando blues para sí mismo en casa porque "¿Qué haría cuando tenga 80 años? ¿Tocar Master of Pupppets?", y eso me puso a pensar en mi propio futuro (sí, los roqueros tendemos a tener momentos de entendimiento y hallamos iluminación en los las cosas y momentos más extraños). En el futuro podría jugar Dungeons and Dragons con mis hijos, y quizás un par de juegos de consola o en línea (WoW probablemente siga ahí), pero creo que enseñarles a tocar guitarra y tal vez incluso improvisar con ellos en algún momento podría ser una cosa más perdurable. Cuando finalmente tomé la decisión de aprender a tocar guitarra, empecé a preguntar a mis amigos guitarristas por una buena guitarra para principiantes.

Gerardo dijo que fácilmente podría encontrar guitarras Yamaha, Squire, Epiphone, Ibanez y Fender en Lima, y que también era posible encontrar amplis Roland, Fender y Vox, y posiblemente podríamos conseguir un buen descuento si yo compraba todo mi equipo en una sola tienda. Ese fin de semana revisé un par de websites en busca del hacha que pudiese convertir en realidad mis sueños de tocar blues y rock, sólo para tener una idea general del rango de precios. Siendo fan del heavy meta, blues, brit pop y hard rock, siempre he admirado las guitarras Gibson (Jimmy Page, Slash, Angus Young, Noel Gallagher) y Fender (Jimi Hendrix, Eric Clapton, Joe Strummer), y los amplis Marshall, y sabía de antemano que no podía costear nada de eso. Mi amigo punk-emo-hardrock dijo que podía venderme su Yamaha Pacifica 112 azul, usada pero bien cuidada, pero primero teníamos que ver precios. Así que salimos de compras una buena tarde de mediados de invierno.

Empezamos revisando las Fender en una tienda grande, luego pasamos a las más costeables Epiphones, Squires y Yamahas. Después de unos minutos, notamos que yo ya no quería la Pacifica 112 y que él no estaba listo para desprenderse de ella, así la tarde de comparar precios se convirtió en la búsqueda de una guitarra buena y costeable y un ampli pequeño y decente. Yo estaba echándole el ojo a una Epiphone Les Paul (la cual fue rápidamente descartada pues hubiese terminado en bancarrota y tirando dedo para volver a casa), una Squire Stratocaster negra y un simpático ampli Fender Frontman 15G (el que tiene controles de overdrive) que estaba en oferta, pero los precios eran algo elevados. Afuera, el sol ya se estaba ocultando y el cielo de mediados de invierno tenía una hermosa tonalidad naranja oscuro.

Luego caminamos hacia las tiendas pequeñas en el área, y preguntamos por las Squire Strats (negra por favor, porque rojo, beige, blanco y vino tinto no funcionan). La primera que encontramos se veía bien, y tenía descuento con un lindo y pequeño ampli amarillo de marca desconocida, pero el conector de la guitarra estaba actuando raro y no tenían otra Strat negra. Así que fuimos a la tienda de al lado. Sólo la tenían en vino tino, pero tenían amplis Fender de máscara plateada, y tenían un montón de guitarras Ibanez en las vitrinas (incluyendo una bella Artcore roja con trémolo vintage, de la cual me enamoré de inmediato y pienso comprarla en cuanto aprenda a tocar decentemente y pueda costearla), algunas Epiphone SGs, y una Dean Razorback con el contorno verde limón.

Continuamos con nuestra búsqueda de una Squire Strat negra y un pequeño ampli Fender. Tras dar algunas vueltas y encontrar sólo una Strat negra algo cara (y varias rojas y vino tinto más baratas… da que pensar), decidimos que era hora de volver a la pequeña tienda con la Artcore roja y darle una oportunidad a las hachas Ibanez. Pedimos probar las guitarras con el mismo ampli que estaba en oferta en la tienda grande. En la siguiente media hora probamos una RG cara (aunque estaba en oferta), un par de otras y finalmente una GRX20. A ambos nos gustó, así que teniendo en cuenta que yo estaba por empezar a aprender y él es ya un guitarrista algo experimentado, era una buena señal. Resultó mejor cuando la señora del mostrador mencionó el precio y este resultó ser menor a todas las Strats que vimos esa tarde. Tras regatear terminamos saliendo de la tienda con una Ibanez GRX20 negra, un ampli Fender Frontman 15G de máscara plateada, bolsa, correa, cable, un afinador Korg (sinceramente no puedo afinar de oído aunque mi vide dependa de ello), una uña Dunlop Nylon .88mm y una Alice .71mm. Después sólo tuve que meter todo eso en el asiento de al lado en el bus y regresar a casa. Sobre nosotros, el cielo de mediados de invierno estaba ya negro como mi primera guitarra.

En los siguientes días noté que incluso tocando a bajo volumen, mis sesiones de aprendizaje podían ser un poco incómodas para los otros ocupantes de la casa (mamá, papá y mi hermano mayor… más sobre él en un futuro posteo). En busca de una solución que me permitiese sobrecargar el ampli y subir el volumen, hice arreglar mis audífonos Genius y los usé por alrededor de una semana, cuando se volvieron a malograr. Después de eso empecé a usar mis robustos audífonos Targus (los mismos que uso con mi CD player y mi PC), porque trabajan mejor a volúmenes altos y son más durables. Un par de semanas después noté que en realidad tenía que desempacar y armar la guitarra (sacarla de la bolsa, ponerle la correa y el brazo de trémolo –por la pose y porque me gusta jugar con él- y conectarla al ampli), y luego volverla a desarmar y empacar dos veces al día porque estaba practicando una hora por la noche y media hora por la mañana. Era tiempo de comprar un stand. Encontré un simpático stand en la misma tienda pequeña por un precio razonable, y ya que era cliente recurrente y estaba comprando también algunas uñas Dunlop adicionales, me dieron un buen descuento y volví a casa después de echarle ojo a uno pedales Boss de distorsión y coro. Estaba empezando la tarde tres semanas después de comprar mi hacha, y el sol brillaba perezoso tras las nubes de un cielo gris de mediados de invierno.

La adición más reciente es una pequeña caja plástica de herramientas que compré en una tienda de plásticos cerca de la casa. Su función principal es mantener el afinador, las uñas y los cables en un solo lugar. Será incluso más útil una vez que aprenda a tocar decentemente y compre el Floor POD de Line 6 y los cables Fender Vintage Voltage que quiero regalarme para Navidad o tal vez para mi cumpleaños del próximo año.

Ahora mi hacha está sentada en mi habitación, al lado del ampli y la caja de herramientas, lista para practicar día o noche… incluso si no practico tanto como debiera. Ahora, si tan sólo pudiese conseguir unas camisetas Ibanez y Fender y una casaca que dijera Dunlop en la espalda.

'Nuff said.

#80

Decidí publicar la entrada anterior en inglés porque la escribí así y me dio flojera traducirla, pero hoy en la mañana (es decir hace unos minutos) me dijeron que sería bueno si posteo también una versión en español, como hice con mi despedida a los Knights of Sparta. Así que una versión en español estará lista en un par de horas, proque antes tengo que desayunar y ver la repetición de The Big Bang Theory.

'Nuff said.

How I got my axe and current gear

For a long time I have wanted to learn to play electric guitar. The idea first came to my mind when I was still in high school, and buying a guitar was a matter of not only having the money to pay for it, but also the time to make a day's trip to find one 90km north --which is more or less the same as today, just that I can afford it on my own now and I am already traveling those 90km back and forth everyday. Back then, it was a near epic adventure. So the idea sat at the back of my mind for some twelve years, making casual appearances from time to time (specially when I was near a guitar or a guitar store), and air guitar became a part of my daily life. Then Guitar Hero, Rock Band and Frets on Fire came out to help me quench that guitar playing thirst. Then I read a Rolling Stone interview with Kirk Hammett where he mentioned he was playing blues for himself at home because "What would I do when I'm 80 years old? Play Master of Puppets?", and that got me thinking about my own future (yes, we rockers tend to have moments of insight and find illumination in the weirdest moments and things). In the future I could play Dungeons and Dragons with my children, and maybe a couple console or online games (WoW will probably still be around), but I think that teaching them to play guitar and maybe even jamming with them at some point could be a more perdurable thing. When I finally made the decision to learn to play guitar, I started asking my guitar-playing friends for a beginner's guitar.

Gerardo said I could easily find Yamaha, Squire, Epihone, Ibanez and Fender guitars in Lima, and it was also possible to find Roland, Fender and Vox amps, and that I could possibly get a good discount if I purchased all my gear in the same store. That weekend I checked a couple websites looking for the one axe that could make my blues-rock playing dreams come true, just to have vague idea of the price range. Being a heavy metal, blues, brit pop and hard rock fan I have always admired Gibson (Jimmy Page, Slash, Angus Young, Noel Gallagher) and Fender (Jimi Hendrix, Eric Clapton, Joe Strummer) guitars and Marshall amps, and I knew beforehand I could not afford any of those. Gerardo said he could sell me his used-but-well-cared-for blue Yamaha Pacifica 012, but we had to check prices first. Therefore, we went shopping one fine midwinter afternoon.

We started by checking out the cool Fender guitars at a big store, and then moved on to the more affordable Epiphones, Squires and Yamahas. After a few minutes, we noticed I no longer wanted the Pacifica 012 (and he was not ready to let it go), so we turned the price comparing afternoon into a quest for an affordable good guitar and a decent small amp. I was eyeballing a vintage sunburst Epiphone Les Paul (wich was quickly discarded because I would have ended up broke and hitchhiking my way home), a black Squire Stratocaster and a nice Fender Frontman 15G amp (the one with overdrive controls) that was on sale, but the price tags were a little high. Outside, the sun was already setting and the midwinter sky had a beautiful burnt orange hue.

We then walked to the small stores in the area and asked for the Squire Strats (black please, because red, beige, white and burgundy just do not cut it). The first one we found looked fine, and it came at a discount with a cute little yellow unknown-brand amp, but the guitar jack was acting funky and they did not have another black Strat. So we went to the store next door. They only had it in burgundy, but they carried blackfaced Fender amps (skirted knobs, silver grilled cloth), and had a lot of Ibanez guitars on display (including a beautiful red Artcore with a vintage tremolo I immediately fell in love with and plan on buy it once I learn how to play decently and can afford it), a few Epiphone SGs, and a Dean Razorback with lime green lines.

We continued our quest for a black Squire Strat and a small Fender amp. After walking around and finding only one other black Strat with an expensive price tag (and many red and burgundy ones with cheaper tags... makes me wonder), we decided it was time to go back to the small store with the red Artcore and give the Ibanez axes a shot. We requested to try the guitars with the same amp that was on sale at the big store. Over the next half hour we checked an expensive RG (it was on sale though), a couple others and finally a GRX20. We both liked it, so given I was about to start learning and he was an already somewhat seasoned player, that was a good sign. It turned better when the lady at the counter said it had a lower price tag than all the Strats we saw that afternoon. After some bargaining we ended up leaving the store with a black Ibanez GRX20, a blackfaced Fender Frontman 15G, gigbag, strap, cable, a Korg tuner (I sincerely can not tune the guitar by ear for my life) a Dunlop Nylon .88mm pick and an Alice .71mm pick. Then I just had to try to fit everything in the seat next to me in the bus and ride home. Above us, the midwinter sky was already black as my first guitar.

Over the next few days I noticed that even though I played at low volume, my learning sessions could still be a little bothersome for the other occupants of the house (mom, dad and my older brother... more on him on a future post). Looking for a solution that would still let me overdrive the amp and crank the volume up, I had my broken Genius headphones fixed and used them for about a week, when they broke again. After that I started using my sturdy Targus headphones (the same ones I use with my CD player and my PC), because they work better at loud volumes and are more durable. A couple weeks later I noticed I actually had to unpack and set my guitar (get it out of the gigbag, attach the strap and tremolo arm --just for the looks and because I like playing with it- and plug to the amp), and then unset and pack it two times a day because I was practicing an hour every night and half an hour every morning. It was time to get a stand. I found a nice stand at the same small store for a reasonable price, and since I was already a returning customer and was also purchasing some more Dunlop picks, I got a nice discount and went back home after eyeballing some Boss distortion and chorus pedals. It was early afternoon three weeks after purchasing my axe, and the sun shined lazily behind the clouds of a grey midwinter sky.

The latest addition is a small plastic toolbox I purchased at a plastics store near my house. Its primary use is to keep the tuner, picks and cables in one place. It will be even more useful once I learn to play decently and purchase the Line 6 Floor POD and the Fender Vintage Voltage cables I plan to get myself for Christmas or maybe for my birthday next year.

Now my axe sits in my room, right next to the amp and the toolbox, ready for some practice day or night... even if I do not practice as much as I should. Now, if I could only get Ibanez and Fender shirts and a jacket that reads Dunlop on the back.

'Nuff said.

domingo, 7 de septiembre de 2008

Spellbook, random page #2

I was talking to a woman who isn't there anymore, but her shadow was looking at me.

I hear her voice from somewhere around, and I react to it as I always did. It echoes in the air, coming to my ears from a place beyond this plane of existence.